A11y block

El monstruoso capitalismo

entrada blog_alejandro (1)

El inicio del nuevo Gobierno liderado por el presidente Gustavo Petro ha generado diversas reacciones y emociones en los distintos grupos sociales debido a las promesas de cambio planteadas durante su campaña, y los esbozos de reforma propuestos en su administración. Si bien es cierto que los cambios son necesarios, ya que, la existencia de problemas estructurales en el país está soportado en diversos estudios y diagnósticos, es importante evitar caer en una narrativa fatalista que ataque a las instituciones y reproduzca un argumento falaz contra el sistema económico capitalista, especialmente con propuestas que producirían más efectos negativos que positivos en una comparación histórica de resultados del mismo sistema que se critica.

Para simplificar el análisis, podemos dividir la realidad en cuatro componentes: económico, social, institucional y ambiental. A lo largo de la historia del capitalismo, hemos visto avances significativos en cada uno de estos aspectos. Desde finales del siglo XVIII hasta principios del siglo XXI, se han logrado mejoras importantes, como la reducción del porcentaje de personas viviendo en pobreza extrema del 85% al menos del 12%, un aumento en la esperanza de vida al nacer de 28 años a 72 años, una mejora en la estatura promedio de las personas entre 10 y 12 centímetros, la reducción del analfabetismo del 88% a menos del 15%, el aumento del porcentaje de personas viviendo en democracia del 1% al cerca del 60% y del 98% de países sin derecho universal al voto a menos del 5%, el aumento de la probabilidad de supervivencia de un recién nacido del 30% al más del 95%, la rebaja de 100 veces de la mortalidad materna y la tendencia reciente (últimos 30 años) de disminución en cerca de la mitad en la mortalidad por contaminación del aire y aumento del crecimiento económico con una reducción en las emisiones de dióxido de carbono. Si hacemos un ejercicio similar para Colombia, estaríamos de acuerdo que la mejora es innegable.

El capitalismo, tal como se construyó en los siglos XIX y XX, se basó en los pilares de la propiedad privada, el libre mercado, la competencia, la división del trabajo, la cooperación social y el respeto a la democracia y las libertades individuales. Aunque estos pilares han sido combinados de manera diferente según la historia y cultura de cada sociedad, han demostrado ser efectivos y han llevado al éxito y progreso en muchos casos, demostrando que el capitalismo es un sistema social con capacidad de aprendizaje y resiliencia, que ha evolucionado a lo largo de la historia para adaptarse a las necesidades de cada sociedad. Por eso mismo, es necesario que la narrativa en contra del capitalismo se elimine, especialmente cuando empieza a atacar con fuerza sus pilares de sostenimiento.

Sin embargo, no significa que no se necesiten cambios. Es preciso continuar trabajando en el desarrollo y evolución del capitalismo en el siglo XXI para lograr un mayor progreso y bienestar social, sin atacar sus pilares fundamentales. En lugar de enfocarse en una narrativa en contra del capitalismo, debemos trabajar en implementar cambios que permitan continuar mejorando el sistema y adaptándolo a las necesidades de la sociedad actual. De esta manera, podremos seguir avanzando en el desarrollo y progreso individual y colectivo, aprovechando los beneficios que este sistema ha demostrado a lo largo de la historia.

 Publicado originalmente en El muro de las columnas, en abril 21 del 2023. Enlace de la publicación original.

Compartir
Autor:

Alejandro Barrera Escobar

Descripción del autor

Es Analista económico con experiencia en planificación, ejecución y coordinación de estudios económicos. Es profesor de la Facultad de Ciencias Contables, Económicas y Administrativas de la Universidad de Manizales, economista de la mima universidad y Magíster en Economía y Finanzas de la Università degli Studi di Palermo.

Comentarios

Texto sin formato

  • No se permiten etiquetas HTML.
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.
  • Las direcciones de correos electrónicos y páginas web se convierten en enlaces automáticamente.

Blog main

Más de este autor: